Las zonas de almacenamiento son entornos críticos donde se almacenan mercancías valiosas y se realizan operaciones logísticas clave. Sin embargo, estos espacios también presentan riesgos potenciales que pueden poner en peligro tanto a los trabajadores como a las instalaciones. En este artículo, te explicaremos cuáles son los principales riesgos existentes en estas áreas y cómo puedes mitigarlos.
¿Cuáles Son los Principales Riesgos en Zonas de Almacenamiento?
Independientemente del tipo de almacén o industria, ciertos riesgos son comunes en todos ellos. A continuación, detallamos los más frecuentes:
Caída de personas
El uso inadecuado de carretillas elevadoras o plataformas.
Suelos sucios o mojados que provocan resbalones.
Tropiezos por materiales no recogidos o mal organizados.
Caída de objetos
Los objetos pesados o mal apilados pueden caer sobre los trabajadores, causando lesiones graves. Algunas causas incluyen:
Materiales mal colocados en estanterías.
Manipulación incorrecta de objetos en altura.
Estanterías mal construidas o sobrecargadas.
Apilamiento inestable de productos.
Golpes y choques
Los golpes entre personas, vehículos o equipos son otro riesgo común en almacenes. Esto puede suceder debido a:
Objetos que invaden pasillos o zonas de paso.
Colisiones entre trabajadores o vehículos industriales.
Cortes con herramientas
El uso de herramientas afiladas, como navajas o cutters, puede resultar en cortes si no se manejan adecuadamente. También es importante revisar:
Cajas rotas o embalajes en mal estado.
Contactos eléctricos
Manipular electricidad
Materiales eléctricos mal instalados
Cables por el suelo
Incendios o explosiones
Carga de baterías
Almacenamiento de productos que pueden generar reacciones químicas
Almacenamiento de sustancias explosivas
Roces con objetos
Medidas de seguridad en las zonas de almacenamiento
- Las zonas donde se almacenan materiales y productos deben estar clasificadas para saber donde va cada uno y no haya margen de error.
- Las estanterías tendrán que señalizar la carga máxima que pueden soportar.
- Detectar si existe alguna estantería debilitada o en mal estado ya que es un lugar poco seguro para apoyar objetos.
- El apilamiento de objetos debe ser estable, homogéneo, respetando la altura máxima y la forma de los materiales según lo que resista.
- Comprobar periódicamente los embalajes, plataformas, estanterías y materiales que puedan estar defectuosos.
- Cuando un trabajador sufra una caída de objetos encima, es recomendable desmontar la carga en el sitio y luego retirar al trabajador.
Como conclusión, debemos recordarte la importancia que supone realizar inspecciones periódicas para comprobar que las instalaciones estén seguras y formar a los empleados de estas zonas para evitar estos riesgos innecesarios.